Orando mientras el dolor progresaba.
Neny continuó orando mientras los desafíos de Somaya aumentaban. Cuando empezó a aprender a hablar, los labios malformados de Somaya hacían casi imposible el formar palabras. Ella tenia problemas al comer y beber.
“Ella estaba siempre enferma”, Neny nos dijo. “Estaba siempre tosiendo”.
Entonces un día Neny vio un programa de TV que le informó que Mercy Ships estaba por llegar a Madagascar a proveer cirugías gratuitas. Su esperanza creció enormidades. “Esta es una respuesta de Dios”, ella pensó. Corrió a conseguir una tarjeta de evaluación para Somaya.—pero dos días antes de la evaluación la casa de Neny se quemó y la tarjeta fue destruida. Neny tuvo ganas de abandonar toda esperanza para su hija.
Un hospital flotante. Una segunda oportunidad.
El perder la tarjeta de evaluación le pesaba a Neny, pero cinco meses más tarde recuperó la esperanza cuando Neny escuchó que Mercy Ships estaba regresando a Madagascar. ¡Somaya tendría una segunda oportunidad! En la sala del barco hospital, Neny y Somaya se reunieron con otras madres y niños con hendiduras. Ya no se sentían solas. Pronto, la cirugía de Somaya que cambiaría su vida fue programada.
Sonrisas para todos.
Después de la cirugía de Somaya, Neny no podía dejar de sonreír ella misma.
“¡Ahora está sana!”, ella dijo. “Ahora puede comer y beber normalmente … Ella dice: ”¡Agua, mamá!”.
Mientras se preparaban para regresar a su aldea, Neny no podía esperar el momento de poder mostrar a sus vecinos la dulce sonrisa de Somaya.
“Se sorprenderán al verla con estos labios”, dice con una sonrisa.