La historia de Diongnima

 

Conozca a Diongnima

Con sólo 14 años, Diongnima pasó la mayor parte de su infancia con un tumor creciente en el ojo izquierdo. Durante nueve años, el tumor causó problemas físicos a Diongnima, obstruyendo su visión, pero afectó aún más a su espíritu. 

“Lo desmoralizó“, cuenta su primo Mamadou. “No sabíamos qué hacer. Hicimos todo lo que se nos ocurrió, pero no teníamos solución“. 

Aunque su familia buscó tratamiento por todo Senegal, tuvo dificultades para encontrar a alguien que pudiera ayudar a su hijo. Con el tiempo, el tumor –causado por un trastorno genético llamado neurofibromatosis- creció, dejando a Diongnima descorazonado.

Diongnima soñaba con ser futbolista profesional, pero sabía que su enfermedad le impediría cumplir su sueño. Debido a su visión obstruida, sus compañeros se burlaban de él diciéndole: “No puedes jugar; ¡siéntate en el banquillo!”

Había muchas cosas que no podía hacer a causa del tumor: en primer lugar, el fútbol, pero también la agricultura y la cría de animales“, explica Diongnima. Sin la coordinación óculo-manual necesaria para este tipo de trabajos prácticos, la familia de Diongnima no se imaginaba que siguiera los pasos de su padre como minero de oro y, en su lugar, le animó a que se convirtiera en maestro. 

Tenía una vida triste antes de la operación. Estaba triste porque mis amigos hacían cosas que yo no podía hacer“, cuenta Diongnima. “En la escuela, me sentaba solo porque no podía sentarme con mis compañeros“.

Su tumor lo hacía propenso a las burlas, así que Diongnima se ponía un sombrero para ocultarlo. 

Llevaba el sombrero todo el tiempo sin quitárselo“, explica Mamadou. Incluso se lo ponía para dormir. Diongnima se sentía un extraño en su propia comunidad, por lo que tanto él como su familia estaban preocupados por su futuro. 

Ese futuro empezó a mejorar cuando un día, Diongnima oyó hablar de un buque hospital que visitaba Senegal. Recuperada la esperanza, Diongnima viajó 500 millas a través del país hasta la capital, Dakar. Por desgracia, la pandemia obligó al Africa Mercy a zarpar a principios de 2020 antes de que Diongnima pudiera someterse a la operación que necesitaba. Pero la esperanza no se perdió. Diongnima y su familia esperaron emocionados el día en que el buque regresara, cuando por fin tendría la oportunidad de someterse a una operación que le cambiaría la vida.

Ese día llegó en 2022, cuando Diongnima abordó el Africa Mercy para ser operado y extirparle el tumor. Por fin, tras años de lucha, Diongnima podía ver con claridad su futuro, ahora lleno de infinitas posibilidades. 

Cuando llegue a casa, lo primero que voy a hacer es jugar al fútbol“, dijo Diongnima riendo durante su recuperación. Una vez sanado, el joven regresó a su aldea del sudeste de Senegal, dispuesto a abrazar de nuevo a su comunidad.  

Mamadou recuerda el momento en que vio por primera vez la frente sanada de Diongnima tras la exitosa operación: “Cuando lo vi, nos pusimos muy contentos porque era lo que queríamos. Su comportamiento ha cambiado mucho… ha vuelto a ser el verdadero Diongnima“. 

Su familia compartió que la sanidad de Diongnima fue más allá de la restauración físicasino también a su espíritu. Gracias a la amabilidad y el aliento que encontró en el Africa Mercy, Diongnima recordó lo que se siente pertenecer a algo.

“Las personas que trabajan en el buque tienen una amabilidad que no he visto en mi vida“, compartió Diongnima. En su experiencia, los voluntarios a bordo, así como los demás pacientes, miraron más allá de su tumor para relacionarse con él. Le enseñaron nuevos juegos de cartas, tocaron la guitarra y practicaron francés con él. “Es muy bueno, es lo que la gente debería hacer en la vida“. 

Puede que Diongnima siempre soñara con ser futbolista profesional, pero después de su estancia en Mercy Ships, ve otro camino.  

“Me gusta cómo cuidan de los pacientes en el buque“, dice. “Me hace mucha ilusión. Aparte de convertirme en futbolista profesional, ser médico es lo que me gustaría llegar a ser.” 

Gracias a amigos como usted, Diongnima recibió una cirugía que le cambió la vida en el Africa Mercy.